lunes, 2 de mayo de 2011

Las fábulas de Rubén Abella


Rubén Abella es el profesor de Literatura Contemporánea del siglo XX y tiene la expresión alerta de un electrocutado o, por lo menos, de alguien que ha metido dos dedos en un enchufe. Es iónico. Y es gris. Pero no de un gris anubarrado, sino del gris bruñido de algunos metales. Creo que justo por eso pareciera que siempre lo atravesara una corriente eléctrica que se descarga con locuacidad, con prolijidad, con brillo y con serios atracones de Sugus. Una vez conté ocho Sugus en una clase; seguramente, uno por cada autor que ha dejado fuera de lista, por cada crimen de esos que él dice que comete en sus selecciones.

Un sábado de Jaula Creativa (como hemos rebautizado el evento) Rubén Abella nos habló de Las fuentes de la escritura. Fundamentalmente, hizo énfasis en la simbiosis entre la palabra y la imagen fotográfica, cópula que ha hecho prosperar, en conjunto, dos de sus vocaciones: la literatura y la fotografía.

De esta doble raíz despuntan estas fábulas con dos cabezas: las Fábulas del lagarto verde. Se trata de un «proyecto híbrido, con cuerpo de documental y cabeza de ficción» en el que Rubén Abella desovilla las pequeñas historias que se anidan y se anudan en el instante de una imagen. Aunque el trabajo se sitúa en Cuba —ese «lagarto verde» sobre el que poetizó Nicolás Guillén—, Abella busca la transcendencia del contexto cubano con el fin de reivindicar el papel de la ficción y «reflexionar en clave lírica sobre la condición humana».

A continuación, una pequeña muestra de sus fábulas.

(Hacer click sobre las imágenes).






No hay comentarios:

Publicar un comentario